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Piensan los hombres que se les dejar� decir: ��Creemos!�, sin ser probados?

Ya probamos a sus predecesores. Al�, s�, conoce perfectamente a los sinceros y conoce perfectamente a los que mienten.

�Piensan quienes obran mal que podr�n escapar de Nosotros? �Qu� mal juzgan!

Quien cuente con encontrar a Al� sepa que el plazo fijado por Al� vendr� ciertamente, �l es Quien todo lo oye, Quien todo lo sabe.

Quien combate por Al� combate, en realidad, en provecho propio. Al�, ciertamente, puede prescindir de las criaturas.

A quienes hayan cre�do y obrado bien les borraremos, s�, sus malas obras y les retribuiremos, s�, con arreglo a sus mejores obras.

Hemos ordenado al hombre que se porte bien con sus padres. Pero si �stos te insisten en que Me asocies algo de lo que no tienes conocimiento, �no les obedezcas! Volver�is a M� y ya os informar� de lo que hac�ais.

A quienes hayan cre�do y obrado bien hemos de hacer que entren a formar parte de los justos.

Hay algunos que dicen: ��Creemos en Al�!� Pero, en cuanto sufren algo por Al�, toman la prueba a que los hombres les somenten como castigo de Al�. Si, en cambio, tu Se�or les auxilia, seguro que dicen: ��Est�bamos con vosotros!� �Es que Al� no sabe bien lo que hay en los pechos de la Humanidad?

Al�, s�, conoce perfectamente a los que creen y conoce perfectamente a los hip�critas.

Los infieles dicen a los creyentes: ��Seguid nuestro camino y cargaremos con vuestros pecados!� Pero, si ni con sus propios pecados cargan nada... �Mienten, ciertamente!

Llevar�n, ciertamente, su carga juntamente con la ajena. El d�a de la Resurrecci�n tendr�n que responder de lo que se inventaban.

Enviamos No� a su pueblo y permaneci� con �l durante mil a�os menos cincuenta. Luego, el diluvio les sorprendi� en su impiedad.

Les salvamos, a �l y a los de la nave, e hicimos de ella un signo para todo el mundo.

Y a Abraham. Cuando dijo a su pueblo: ��Servid a Al� y temedle! Es mejor para vosotros. Si supierais...�

Serv�s, en lugar de servir a Al�, s�lo �dolos, y cre�is una mentira. Los que vosotros serv�s, en lugar de servir a Al�, no pueden procuraros sustento. �Buscad, pues, en Al� el sustento! �Servidle, dadle gracias! �A �l ser�is devueltos!

Si desment�s, ya otras generaciones, antes de vosotros, desmintieron. Al Enviado s�lo le incumbe la transmisi�n clara.

�Es que no ven c�mo inicia Al� la creaci�n y, luego, la repite? Es cosa f�cil para Al�.

Di: ��Id por la tierra y mirad c�mo inici� la creaci�n! Luego, Al� crear� por �ltima vez. Al� es omnipotente�.

Castiga a quien �l quiere y se apiada de quien �l quiere. A �l ser�is devueltos.

No pod�is escapar en la tierra ni en el cielo. No ten�is, fuera de Al�, amigo ni auxiliar.

Quienes no crean en los signos de Al� y en que Le encontrar�n, �sos son quienes desesperar�n de Mi misericordia, �sos son quienes sufrir�n un castigo doloroso.

Lo �nico que respondi� su pueblo fue: ��Matadle o quemadle!� Pero Al� le libr� del fuego. Ciertamente hay en ello signos para gente que cree.

Dijo: �Hab�is tomado �dolos en lugar de tomar a Al�, s�lo por el afecto mutuo que os ten�is en la vida de ac�. Luego, el d�a de la Resurrecci�n, renegar�is unos de otros y os maldecir�is mutuamente. Vuestra morada ser� el Fuego y no tendr�is quien os auxilie�.

Lot crey� en �l y dijo: �Me refugio en mi Se�or. �l es el Poderoso, el Sabio�.

Le regalamos Isaac y Jacob, e instituimos en su descendencia el profetismo y la Escritura. Le recompensamos en la vida de ac�, y en la otra es de los justos.

Y a Lot. Cuando dijo a su pueblo: �Ciertamente comet�is una deshonestidad que ninguna criatura ha cometido antes.

�Os lleg�is a los hombres, salte�is y comet�is actos reprobables en vuestras reuniones?�. Lo �nico que respondi� su pueblo fue: ��Tr�enos el castigo de Al�, si es verdad lo que dices!�

Dijo: ��Se�or! �Aux�liame contra el pueblo corruptor!�

Cuando Nuestros mensajeros vinieron a Abraham con la buena nueva, dijeron: �Vamos a hacer perecer a la poblaci�n de esta ciudad. Son unos imp�os�.

Dijo: �Pero Lot est� en ella�. Dijeron: �Sabemos bien qui�n est� en ella. Les salvaremos, ciertamente, a �l y a su familia, excepto a su mujer, que ser� de los que se rezaguen�.

Habiendo llegado nuestros mensajeros a Lot, �ste se afligi� por ellos y se sinti� impotente para protegerles. Pero ellos dijeron: ��No temas ni est�s triste! Vamos a salvaros, a ti y a tu familia, excepto a tu mujer, que ser� de los que se rezaguen.

Vamos a hacer bajar un castigo del cielo sobre la poblaci�n de esta ciudad, porque han sido unos perversos�.

E hicimos de ella un signo claro para gente que razona.

A los madianitas su hermano Suayb. Dijo: ��Pueblo! �Servid a Al� y contad con el �ltimo D�a! �No obr�is mal en la tierra corrompiendo!�

Le desmintieron y el Temblor les sorprendi�, amaneciendo muertos en sus casas.

�Y a los aditas y a los tamudeos! Por sus viviendas se os muestra claramente... El Demonio engalan� sus obras y los apart� del Camino, a pesar de su perspicacia.

�Y a Cor�, a Fara�n y a Ham�n! Mois�s vino a ellos con las pruebas claras y ellos se condujeron en el pa�s altivamente. Pero no consiguieron escapar.

Sorprendimos a cada uno por su pecado. Contra unos enviamos una tempestad de arena. A otros les sorprendi� el Grito. A otros hicimos que la tierra se los tragara. A otros les anegamos. No fue Al� quien fue injusto con ellos, sino que ellos lo fueron consigo mismos.

Quienes toman amigos en lugar de tomar a Al� son semejantes a la ara�a que se ha hecho una casa. Y la casa m�s fr�gil es la de la ara�a. Si supieran...

Al� sabe todo lo que invocan en lugar de invocarle a �l. Es el Poderoso, el Sabio.

Proponemos estas par�bolas a los hombres, pero no las comprenden sino los que saben.

Al� ha creado con un fin los cielos y la tierra. Ciertamente, hay en ello un signo para los creyentes.

�Recita lo que se te ha revelado de la Escritura ! �Haz la azal�! La azal� proh�be la deshonestidad y lo reprobable. Pero el recuerdo de Al� es m�s importante a�n. Al� sabe lo que hac�is.

No discut�is sino con buenos modales con la gente de la Escritura, excepto con los que hayan obrado imp�amente. Y decid: �Creemos en lo que se nos ha revelado a nosotros y en lo que se os ha revelado a vosotros. Nuestro Dios y vuestro Dios es Uno. Y nos sometemos a �l�.

Y, as�, te hemos revelado la Escritura. Aqu�llos a quienes revelamos la Escritura creen en ella. Entre �stos hay algunos que creen en ella. Nadie rechaza Nuestros signos sino los infieles.

T� no le�as, antes de recibirla, ninguna Escritura, ni copiabas ninguna con tu diestra. Los falsarios, si no, habr�an sospechado...

Antes bien, es un conjunto de aleyas claras en los pechos de quienes han recibido la Ciencia. No niegan Nuestros signos sino los imp�os.

Dicen: ��Por qu� no se le han revelado signos procedentes de su Se�or?� Di: �S�lo Al� dispone de los signos. Yo soy solamente un monitor que habla claro�.

�Es que no les basta que te hayamos revelado la Escritura que se les recita? Hay en ello una misericordia y una amonestaci�n para gente que cree.

Di: ��Al� basta como testigo entre yo y vosotros! Conoce lo que est� en los cielos y en la tierra. Quienes crean en lo falso y no crean en Al�, �sos ser�n los que pierdan�.

Y te piden que adelantes el castigo. Si no fuera porque ha sido prefijado, les habr�a ya alcanzado. Les vendr�, en verdad, de repente, sin presentirlo.

Te piden que adelantes el castigo. S�, la gehena cercar� a los infieles.

El d�a que el castigo les cubra de pies a cabeza y diga: ��Gustad el fruto de vuestras obras!�

�Siervos creyentes! �Mi tierra es vasta! �Servidme, pues, a M� solo!

Cada uno gustar� la muerte. Luego, ser�is devueltos a Nosotros.

A quienes hayan cre�do y hecho el bien hemos de alojarles en el Jard�n, eternamente, en c�maras altas, a cuyos pies fluyen arroyos. �Qu� grata es la recompensa de los que obran bien,

que tienen paciencia y conf�an en su Se�or!

�Cu�ntas bestias hay que no pueden proveerse del sustento! Al� se encarga de �l y del vuestro. �l es Quien todo lo oye, Quien todo lo sabe.

Si les preguntas: ��Qui�n ha creado los cielos y la tierra y sujetado el sol y la luna?�, seguro que dicen: ��Al�!� �C�mo pueden, pues, ser tan desviados!

Al� dispensa el sustento a quien �l quiere de Sus siervos: a unos con largueza, a otros con mesura. Al� es omnisciente.

Si les preguntas: ��Qui�n hace bajar agua del cielo, vivificando con ella la tierra despu�s de muerta?�, seguro que dicen: ��Al�!� Di: ��Alabado sea Al�!� No, la mayor�a no comprenden.

Esta vida de ac� no es sino distracci�n y juego, pero la Morada Postrera, �sa s� que es la Vida. Si supieran...

Cuando se embarcan, invocan a Al� rindi�ndole culto sincero. Pero, en cuanto les salva, llev�ndoles a tierra firme, al punto Le asocian otros dioses,

para terminar negando lo que les hemos dado. �Que gocen por breve tiempo! �Van a ver...!

�No ven que hemos hecho un territorio sagrado y seguro, mientras, alrededor de ellos, secuestran a la gente? �Creen, pues, en lo falso y no creer�n en la gracia de Al�?

�Hay alguien que sea m�s imp�o que quien inventa una mentira contra Al� o que, cuando viene a �l la Verdad, la desmiente? �No hay en la gehena una morada para los infieles?

A quienes hayan combatido por Nosotros �hemos de guiarles por Nuestros caminos! �Al� est�, en verdad, con quienes hacen el bien!