No hacis mal en proponer a tales mujeres casaros con ellas o en ocultarles vuestra intencin de hacerlo. Al sabe que pensaris en ellas. Pero no les prometis nada en secreto! Habladas, ms bien, como se debe! Y no decidis concluir el matrimonio hasta que se cumpla el perodo prescrito de espera! Sabed que Al conoce lo que hay en vuestras mentes, de modo que cuidado con l! Pero sabed que Al es indulgente, benigno.