Alá ha revelado el más bello relato, una Escritura cuyas aleyas armonizan y se reiteran. Al oírla, se estremecen quienes tienen miedo de su Señor; luego, se calman en cuerpo y en espíritu al recuerdo de Alá. Ésa es la dirección de Alá, por la que dirige a quien Él quiere. En cambio, aquél a quien Alá extravía no podrá encontrar quien le dirija.